Hoy quiero hablar de un tema
muy sentido para mi en este momento:
quiero hablar de las
Vidas sospendidas.
Historias diferentes,
pero con un denominador común:
un gran signo de interrogación.
Son las vidas
de las personas desaparecidas
y de sus familias.
En Italia las cifras son aterradoras
y hablan de un fenómeno que,
salvo en muy raras ocasiones,
a menudo pasa en el silencio...
Hasta este momento,
en mi pais,
que aún no se encuentran.
Es sorprendente que,
más allá de los ejemplos más populares,
que hacen muchas noticias en la tele,
es tan grande la cantidad de personas
que siguen desapareciendo...
como si fueran tragados
por una especie de olvido.
El dolor es particularmente difíciles
para los que se quedan.
Ver a una persona que muere
es desgarrador...
pero ver desaparecer alguien que quieres,
sin saber nada...
tal vez pienso que sea aún peor.
Ruego junto a todas las familias
destrozadas por el dolor,
por tener la fuerza de seguir esperando
de volver a ver, un dia,
los que nunca podemos olvidar...